lunes, 29 de octubre de 2012

Design House 2012


“Aunque muchos puedan pensar que la tecnología es la nueva forma de expresión de la imaginación, el diseño sigue siendo la esencia de esta nueva etapa.”
Emilio Cabrero
Director Design Week México.

El diseño de interiores en México está adquiriendo un empuje y calidad que se puede comparar a los niveles alcanzados en las grandes urbes del mundo: Nueva York, Londres, París, Milán… Esto se debe a muchos jóvenes entusiastas y muy preparados que, además de arduo trabajo y creatividad, han comprendido que al compartir sus conocimientos y trabajar en equipo pueden llegar tan lejos como deseen. Fruto de esta excelente actitud profesional, entre otros encomiables ejemplos, es la Design Week México (DWM): una semana dedicada a la promoción de la cultura del diseño a través de diversas actividades que involucran a arquitectos, interioristas, diseñadores industriales y gráficos, estudiantes y al público en general. 

En el marco de la DWM se inauguró, el jueves18 de octubre, la Design House intervenida por 19 firmas de interiorismo y arquitectura en la que se pueden apreciar diversas propuestas creativas. Esta casa, ubicada en Montes Cárpatos 510, Virreyes, Lomas de Chapultepec, fue construida a principios de la década de los ochenta en un terreno boscoso de 1,800 metros, y cuenta con 1,200 metros de construcción que han sido rediseñados, respetando la arquitectura original, para ofrecernos una visión diferente en cada espacio.

Con un diseño innovador como denominador común, cada despacho ha puesto su sello en el espacio de la casa que le ha sido asignado para intervenirlo con su creatividad y utilizando piezas de los más de cincuenta showrooms participantes en este evento.


Durante cuatro semanas C·Cubica Arquitectos, Habitación 116, Studio Roca, Dirk-Jan Kinet interiors, Muro Rojo, entre otras firmas de diseño, en conjunto con marcas como Comex, Casa Palacio, Hunter Douglas, y muchas más que a través del tiempo se han sumado ha este maravilloso esfuerzo, trabajaron para desarrollar y realizar sus proyectos, con la idea de innovar y presentar una forma distinta de abordar cada espacio utilizando diferentes materiales, piezas de mobiliario así como objetos de arte.

Lo más interesante de este ejercicio es la libertad que se tiene para el diseño, pues es una oportunidad en donde se vale experimentar sin tener a un cliente al que se deben de cumplir expectativas, lo que permite desarrollar la imaginación al máximo y realizar propuestas intrépidas. Me parece que el resultado, considerándolo como una unidad, es sumamente interesante: hay mucha audacia y variedad de estilos en las propuestas, y novedades atractivas en la forma de combinar colores, texturas, materiales, mobiliario y accesorios.

Analizando la propuesta de cada despacho, puedo decir que tengo mis preferidas. La recamara principal con vestidor y baño, diseñada por Rodrigo Alegre y Carlos Acosta de Studio Roca, me parece muy atractiva por el empleo del color, por la selección de acabados y por la disposición del mobiliario; mi sección favorita es la zona de los lavabos del baño, pues me parece muy interesante y seductor tanto de noche como de día. Algunos visitantes en la inauguración comentaban que habían descuidado los lavabos, puesto que no tienen un lugar especifico para poner los objetos de arreglo personal, sin embargo, para mí es un área brillantemente resuelta y con una propuesta muy original y estética.

El invernadero intervenido por Javier Claverie y Rafael Rivera de Habitación 116, es un espacio concebido como taller de botánica, jardinería y estudio de un apasionado de los espacios verdes y los insectos. Lo más atractivo de este sitio es la combinación de materiales y piezas; me parece muy acertado el uso de cuero suspendido en los muros, pues crea un ambiente de estabilidad y confort. Éste es otro espacio que tiene su encanto y magia de noche y que de día se percibe más simple, pero sin perder lo acogedor.

Una propuesta que me pareció realmente audaz es la de Elizabeth Gómez Coello, Jorge Medina Robles y German Velasco Espinosa de Muro Rojo en la cocina de la casa. Buscaron generar un vinculo entre el interior y el exterior —a la terraza—cruzando el mueble central de la cocina a través de una apertura sin repellar en el muro; el resultado: un espacio exquisitamente dramático.

De la sala diseñada por María Laura Salinas, de Esencial, quiero resaltar lo que me pareció más atractivo: la utilización de una obra textil del artista colombiano Jorge Lizarazo como fondo y remate del espacio. Me parece una idea fresca atractiva y muy bien ejecutada; para mí, por mucho, lo mejor de la sala.

El garaje techado, un espacio muy ecléctico original y diferente, fue intervenido por Dirk Jan Kinet, quien presenta una historia de gran creatividad para explicar el resultado de diseño de este cautivador rincón, lleno de objetos curiosos y antigüedades con una rica historia.

La terraza diseñada por Andrea Cesarman, quien es la responsable de la concepción de Design House, en esta emisión es quien estuvo a cargo de la propuesta de C·Cúbica Arquitectos, despacho que, junto con Emilio Cabrero y Marco Coello, ha forjado un importante lugar en el mundo de la arquitectura contemporánea en México. En esta ocasión el diseño que presentan es un espacio que seduce los sentidos de cualquier persona: una interesante pérgola y unas columnas de madera talladas muy atractivas; la selección de mobiliario y su distribución me agradó bastante y la manera de colocar la chimenea me parece muy acertada.

El jardín es realmente reconfortante; diseñado por Fernanda Rionda, reconocida paisajista quien, más que diseñar jardines, proyecta ecosistemas. Me parece interesante el concepto silvestre que logra, pues considero que no compite con la arquitectura.
 
Evidentemente, hay más espacios en la casa: el comedor diseñado por Roy Azar, la biblioteca realizada por Francisco Hanhausen, el vestíbulo intervenido por Dupuis, las escaleras y estudio de trabajo por Adán Carabés,  la sala de TV creada por Grupo de Diseñadores, el garage descubierto con una propuesta de casa de árbol diseñada por Materia Arquitectónica, la cava proyectada por grupo M Arquitectos, estudio de música intervenido por Moda in Casa, el pantry diseñado por Nowicka Studio, recámara por Manuel Torres Design, estudio intervenido por Havre 64, y la terraza interior creada por Rocio Martínez. Cada espacio tiene algo atractivo e interesante, realmente vale la pena conocer este ejercicio creativo.

La Design House se puede visitar hasta el 1º de noviembre, de martes a domingo, de 10:15 a 17:30 horas. Es una experiencia que no deberían perderse: ¡ampliamente recomendable para todo público!

Promover la cultura del diseño es el objetivo primordial de la DWM; sus creadores trabajan incansablemente para hacer de este evento algo inolvidable para todos los que de una u otra forma participamos en ella. Realizar un ejemplar trabajo en equipo, integrar a empresas y a la comunidad del diseño, y ofrecer un Design Week —100% hecho en México— me parece un gran esfuerzo que no pasa desapercibido y que cada vez va tomando más fuerza. Mis más sinceras felicitaciones a todo el equipo que hace que esto sea posible.

¡Hasta la próxima!



Teodoro González de León


“La arquitectura se hace solamente con pasión, definitivamente es la primera condición para ejercerla… y mucho trabajo”

Esta afirmación la escuche cuando era estudiante de arquitectura, en la Universidad de las Américas-Puebla, en una conferencia impartida por el arquitecto Teodoro González de León, en una semana de arquitectura y diseño que yo organicé cuando era presidente del consejo de estudiantes de la carrera. Hoy, años después, me doy cuenta que es parte de mi ser; estoy convencida de que para hacer grandes cosas tienes que poner alma y corazón. Puedo decir que escuchar al arquitecto González de León me impactó y me ha motivado a ejercer mi profesión apasionadamente.

El miércoles 17 de Octubre de 2012, en el Hotel Live Aqua Bosques, se llevó acabo la sesión solemne de Fellows CIDI (Consejo Iberoamericano de Diseñadores de Interiores). Previo al evento tuve la fortuna de realizar una entrevista al célebre arquitecto Teodoro González de León; reconocido internacionalmente, autor de obras de gran trascendencia en México y en el extranjero, famoso por el empleo de concreto cincelado en enormes bloques minimalistas que le han impuesto un sello característico a todas sus obras, fundador de una corriente arquitectónica mexicana identificada con la honestidad del material, la simpleza en la composición y la abstracción. A lo largo de su trayectoria profesional ha recibido una gran cantidad de premios y distinciones.

Viéndolo a los ojos, percibo a una persona apasionada por su quehacer profesional, que se entrega a lo que hace y se concentra en lo que dice. Comienzo abordando el tema de las Bellas Artes —concepto que surgió a mediados del siglo XVIII en Alemania—, cuyos defensores argumentan que la pintura, la escultura, la música, la danza, la literatura, la arquitectura, y ahora la cinematografía, pertenecen a un mismo entorno y comparten prácticas fundamentales. Le preguntó: “¿Qué relación encuentra de la arquitectura con el resto de las Bellas Artes?” Su respuesta es contundente: “La arquitectura es la hermana mayor de las artes… es la primera en aparecer en el mundo.” Medita unos segundos y comenta: “Las cuevas y las pinturas rupestres estuvieron primero pero [reflexiona], este arte ha sido colocado en un espacio y los espacios conforman la arquitectura, por lo tanto la arquitectura es la hermana mayor de las artes.”

Una faceta, no tan famosa, de Teodoro González de León es la de pintor; a este respecto comenta: “Un cuadro lo puedo rehacer o cambiar en una tarde, mientras que en la arquitectura los resultados se ven poco a poco, aunque a veces son sorpresivos positiva o negativamente. En este sentido, al estar frente a algunos espacios, en algún momento me he preguntado: ¿cómo pensé en esto?” Reconoce, además, que se dan sorpresas muy desagradables y a veces irremediables.

Para Teodoro González de León el espacio arquitectónico, concebido como arte, tiene un gran contenido poético que produce emoción al recorrerlo, al vivirlo: “Es la meta última de la creación arquitectónica.”


Es común escuchar entre los arquitectos hablar de la influencia en su obra, sin embargo, a veces esta influencia puede caer en el plagio. Al preguntarle a este respecto, comenta: “Uno se hace de lo que ve y absorbe. No sabes en qué momento pero lo haces tuyo y se vuelve parte de ti. No hay nadie que no tenga influencias… vivimos en un mundo en donde lo que vives y observas te va definiendo y haciendo, y esto se reflejará en tu obra. Siempre he intentado no copiarme a mí mismo, que en todo caso, es lo más fácil en lo que uno puede caer, pero a la vez lo más triste.”


Me habla de la importancia de no copiarse nunca. Comenta: “Es muy importante, si se tiene éxito con alguna forma o alguna disposición espacial, que no se repita, hay que transformarla en otra forma.” Reflexiona y precisa: “es necesaria una práctica diaria, resolviendo etapas en turno para ir avanzando en el proyecto. La arquitectura, al igual que la pintura, no se aprende a la primera. Es a través de reiteradas visitas como se empieza a entender. Hay que ver a la arquitectura reiteradamente… es lo que aconsejo a la gente, a los mismos estudiantes: ver, ver mucho y ver con ojos generosos, sin egoísmo. En esta incursión, el arte moderno tiene la gran dificultad de romper con dos mil años de costumbre en la representación de la figura y el mundo natural. Hay que saber que lo nuevo es espíritu y que lo agresivo en el fondo es un contraste, una exaltación nueva. No tiene que verse como algo agresivo, sino como una nueva manera de enaltecer".

Sobre mi cuestionamiento de qué ha aportado a la sociedad, responde: “Eso lo dirán los críticos, pues yo proyecto para el presente, para hoy y ahora, y lo que pase después lo juzgará la historia.” Asegura que él se enfrenta cada día a un nuevo reto y se concentra en solucionarlo de la mejor manera posible, y a su obra, afirma, le tocará juzgarla a los expertos.

Un tema importante del cual se habla mucho en la actualidad es la sustentabilidad y consciencia verde; de la posibilidad de las actuales generaciones para satisfacer sus necesidades sin perjudicar a las futuras generaciones. Le pregunto su opinión sobre el tema y la forma en que su arquitectura se compromete con estos ideales: “Siempre he pensado en esto, que ahora está muy de moda, pero no se debe tomar a la ligera.” En relación al uso de concreto cincelado en enormes bloques comenta, “el concreto es un material extraordinario y maleable, es la gran invención del siglo XX y además resiste muy bien el paso del tiempo, pero no es exclusivo para mí, actualmente estoy utilizando cristal y acero, dos elementos muy ligeros”, definió.

Actualmente el arquitecto González de León se encuentra trabajando en la construcción del edificio de Pedregal 24, un edificio sustentable que se construirá bajo la premisa de la certificación LEED, lo que implica el cumplimiento de un conjunto de normas sobre el uso de estrategias encaminadas a la sustentabilidad en edificios. La también llamada “certificación verde” incluye el ahorro en el consumo de energía y el uso de combustibles alternativos, y la eficiencia en el uso del agua y el desarrollo sustentable de espacios libres, entre otros. Asimismo, el arquitecto añadió que la sustentabilidad es un tema difícil, que tiene que incorporarse poco a poco en la concepción de sus proyectos y en la forma de realizarlos.
Para finalizar, le pregunto al arquitecto Teodoro González de León: ¿Cómo se reinventa como artista? Su respuesta es clara: “Enfrentando el presente, afrontando el tema que toca; es la única manera de reinventarse. Uno no piensa en futuro, el futuro no existe, el futuro lo trabajamos todos los días; para enfrentar el futuro necesitamos conocimiento previo, pasado, que es lo que nos permite no cometer errores, tener una visión amplia; si conocemos el pasado enfrentamos al futuro, enfrentamos al presente y hacemos el futuro que no sabemos cuándo ni cómo pasa.”

Al terminar la que para mí será una inolvidable entrevista, dio inicio el evento que nos convocaba. El arquitecto Juan Bernardo Dolores, presidente del CIDI, entregó el Premio Iberoamericano CIDI Obra emblemática del año a los arquitectos Teodoro González de León y J. Francisco Serrano por su obra Hotel Live Aqua Bosques (Arcos Bosques), así como a sus propietarios. En la misma ceremonia se entregó el Homenaje Iberoamericano CIDI por la trayectoria profesional de Excelencia 2012 al Arquitecto J. Francisco Serrano ­­—máximo reconocimiento CIDI a un profesional de la arquitectura en el territorio iberoamericano—, de manos del arquitecto Teodoro González de León.

 En esta ocasión también se celebró la sociedad comercial de las empresas de clase mundial Grohe, Lamosa y Joyou, quienes son miembros corporativos CIDI. Por último, se llevó a acabo la ceremonia de investidura y entrega de diplomas a nuevos miembros Honorary Fellows CIDI. Fue un honor haber recibido esta distinción, junto con otros colegas a los cuales admiro y respeto, pues es la máxima categoría de un profesional en esta organización.

En el devenir histórico de los pueblos siempre existen personajes claves que colaboran de manera extraordinaria a forjar la cultura y el espíritu de toda una nación; sin la intervención de estos individuos la historia, seguramente, tomaría causes desafortunados. En el México contemporáneo, sin lugar a dudas, el arquitecto Teodoro Gonzáles de León es un estandarte que ha contribuido, de manera decidida, a definir el rostro de nuestra hermosa nación.